Autenticidad de sonido: 7/10
Detalle en producción: 9.5/10
Lírica y concepto: 7/10
Calificación final: 7.8
Para escuchar: Al levantarse con cruda después de una noche en la que encontraste el amor.
Lírica y concepto: 7/10
Calificación final: 7.8
Para escuchar: Al levantarse con cruda después de una noche en la que encontraste el amor.
Cuando eres una banda con una carga tan grande te puede pasar dos cosas: 1. La crítica internacional está premeditada a que tu disco va a ser el mejor, y no importa lo que saques, te van a alabar y te van a querer, pero el tiempo te dará tu lugar ya que en tus siguientes entregas tendrás que superar las expectativas (cualquier similitud con Arctic Monkeys es pura coincidencia); 2. La crítica internacional está premeditada a que tus sencillos son históricos pero tu disco será una reverenda porquería sin sentido de ser lanzado.
Como pueden ver, de cualquier forma, si tienes una alta expectativa que cumplir estás bien jodido. Pero The Big Pink ha logrado sacar un álbum discreto, digno de mejorarse y pulirse, pero también de disfrutarse por ahora. No es un álbum que armará una revolución, y posiblemente no esté dentro de los conteos de los mejores discos británicos de la historia, pero que no mamen, ¡Qué buena canción es "Velvet"! Hacía mucho que no escuchaba una canción tan completa de rock: visceral, sentimentaloide y ruidosa, como las mejores power ballads.
Pero ¿Qué podemos esperar de A Brief History Of Love además de una de las mejores canciones de la década? Mucho ruido, tenlo por seguro. El angelical inicio de "Crystal Visions" es una espectacular bienvenida, lo que una canción abridora debería de ser: una probadita de lo que viene, incluyendo lo mejor de cada canción en una sola, para dar como resultado un momento cumbre.
"Too Young To Love" es un fallido intento por resucitar a New Order. Su repetitiva frase casi tarareada es insistente, pero tan sólo nos deja con mucho ruido y pocas nueces. Pero "Dominos" llega para salvar el día y traernos otra de las mejores canciones que has escuchado de lo que va del año, respondiéndole a la ardillez de la Pau Rubio en su "Causa y Efecto" (JA-JA).
Big Pink hace un análisis del amor en todos sus aspectos: los sueños que te crea ("Crystal Visions"), la resignación (la excelente balada "Love In Vain"), o el amor platónico ("Velvet"). Pero al final se queda en un disco que pudo haber sido mucho más, y que probablemente lo será, pues las buenas ideas se encuentran a flote, es cuestión de anclarlas y aterrizarlas. The Big Pink cuenta con un futuro prometedor, esperemos que no decepcionen en su segundo disco y otra vez en su tercero (cualquier similitud con Arctic Monkeys es pura coincidencia).
Como pueden ver, de cualquier forma, si tienes una alta expectativa que cumplir estás bien jodido. Pero The Big Pink ha logrado sacar un álbum discreto, digno de mejorarse y pulirse, pero también de disfrutarse por ahora. No es un álbum que armará una revolución, y posiblemente no esté dentro de los conteos de los mejores discos británicos de la historia, pero que no mamen, ¡Qué buena canción es "Velvet"! Hacía mucho que no escuchaba una canción tan completa de rock: visceral, sentimentaloide y ruidosa, como las mejores power ballads.
Pero ¿Qué podemos esperar de A Brief History Of Love además de una de las mejores canciones de la década? Mucho ruido, tenlo por seguro. El angelical inicio de "Crystal Visions" es una espectacular bienvenida, lo que una canción abridora debería de ser: una probadita de lo que viene, incluyendo lo mejor de cada canción en una sola, para dar como resultado un momento cumbre.
"Too Young To Love" es un fallido intento por resucitar a New Order. Su repetitiva frase casi tarareada es insistente, pero tan sólo nos deja con mucho ruido y pocas nueces. Pero "Dominos" llega para salvar el día y traernos otra de las mejores canciones que has escuchado de lo que va del año, respondiéndole a la ardillez de la Pau Rubio en su "Causa y Efecto" (JA-JA).
Big Pink hace un análisis del amor en todos sus aspectos: los sueños que te crea ("Crystal Visions"), la resignación (la excelente balada "Love In Vain"), o el amor platónico ("Velvet"). Pero al final se queda en un disco que pudo haber sido mucho más, y que probablemente lo será, pues las buenas ideas se encuentran a flote, es cuestión de anclarlas y aterrizarlas. The Big Pink cuenta con un futuro prometedor, esperemos que no decepcionen en su segundo disco y otra vez en su tercero (cualquier similitud con Arctic Monkeys es pura coincidencia).
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